jueves, 7 de mayo de 2009

MEDIACIÓN FAMILIAR, NUEVO EJE DE DIFUSIÓN DEL MINISTERIO EN LA REGIÓN DE COQUIMBO


Un nuevo frente de difusión se abre en la Región de Coquimbo, propiciado por la Secretaría Ministerial de Justicia. Se trata de la mediación en el ámbito de la justicia familiar, tema que fue abordado junto a profesores, padres y apoderados del Liceo de Niñas Gabriela Mistral y del Colegio Adventista, ambos de La Serena.


La expositora de ambas jornadas fue la Seremi Marcela Muñoz. ¿Preguntas? Muchas y variadas, confirmándose que la mediación y los conflictos familiares son materias de alto interés por parte de la ciudadanía, más todavía cuando -como ocurrió durante las capacitaciones en los establecimientos educacionales señalados- la comunidad aprende sobre las ventajas de la mediación en relación al juicio tradicional que se desarrolla en los juzgados de familia, y más aún cuando ésta será obligatoria, desde el 15 de junio próximo, para los casos de derecho de alimentos para los hijos/as, cuidado personal de los hijos/as (tuición) y relación directa y regular del padre o la madre con los hijos/as que no tienen bajo su cuidado (visitas).

1 comentario:

"el newman" dijo...

Lamentablemente todo lo bueno que se pretende con esta innovación queda sólo en declaraciones. Cuando me acerqué a los Tribunales de Familia a interponer una demanda por visitas, y me dieron una citación para realizar la mediación, tuve la esperanza nuevamente en el sistema. Pero cuando me presento en el dia, hora y lugar establecidos, me doy cuenta que los vicios siguen ahí mismo. La hoja que me pasaron en los tribunales sólo la conocía yo. La institución mediadora no tenía idea de mi existencia y problema, y lo peor, es que nuevamente veo dilatada la solución a mi situación. El sistema puede que haya tenido mejoras con respecto a lo que existía antes, pero mantiene vicios y problemas que siguen poniendo en segundo plano a las personas y sus problemas, bajo el viejo y manoseado argumento de "el sistema está sobrecargado". Y entre tanto espero que este flamante sistema funcione para mi, tengo que seguir esperando por ver a mi hija lejos de las arbitrariedad de su madre. Da rabia y frustración, y finalmente se pierde toda la confianza en la institucionalidad, porque ésta institución funciona mal o simplemente no funciona, al menos y en este caso, para mi. Basta ver la larga e inagotable lista de reclamos para darse cuenta que algo anda mal, y que por mas voluntarismo que se algunas autoridades y funcionarios pongan, las cosas están lejos de cambiar.